CRÓNICA DE PARTIDO: Más Allá de los Puntos, Toca Jugar Sin Balón

1. Contexto: La Necesaria Reestructuración del Equipo

El equipo se encuentra en una fase de reestructuración profunda. Las bajas sensibles que hemos sufrido (por diferentes causas) y las lesiones recientes nos han obligado a tomar decisiones tácticas ineludibles.

Esto nos forzó a dejar de lado el sistema 1-3-6-1, que era nuestra apuesta inicial, para adoptar el 1-4-2-3-1. Soy honesto:

No es un esquema que me entusiasme, pues exige una ejecución casi perfecta para evitar que el equipo se "parta" en dos mitades desconectadas, pero es el camino que debemos recorrer ahora mismo.

2. El Análisis del Partido: Dominio Táctico y Factores Externos

Hoy, sin embargo, logramos ser dominantes. La clave táctica fue la presión alta y la utilización de dos extremos muy abiertos que desmantelaron el esquema del rival.

A nuestro favor jugaron las condiciones: el campo estaba muy rápido y, gracias a la semana de entrenamiento con agua, nos dio ventaja el uso de los balones Adidas, que son auténticas balas sobre terreno mojado. La intensidad del partido del miércoles pasado también ha beneficiado a la preparación del grupo.

3. La Dualidad del Resultado: Faltas de Concentración

Lamentablemente, la falta de consistencia defensiva sigue siendo nuestro principal lastre. No es admisible que un marcador de 3-0 se convierta en un 3-2 por culpa de dos errores individuales graves.

Creamos una auténtica "burrada" de finalizaciones, pero la gran mayoría se ejecutaron de manera deficiente, culminando incluso con un penalti fallado. A pesar de esto, el dato fundamental es que generamos multitud de ocasiones y, lo más importante, el rival no creó absolutamente nada. Hemos mejorado, además, en el juego aéreo. 💪

4. El Mensaje a la Plantilla: La Prioridad es el FÚTBOL

Hoy era fundamental para los chicos sumar puntos, pero a mí ese concepto me da igual. Mi objetivo como entrenador es que jueguen al fútbol. Y eso empieza por la mentalidad: primero hay que jugar sin balón y después jugaremos con la pelota.

Necesitamos que el jugador entienda que el cuerpo técnico no es su enemigo. Hay que interactuar con más cabeza y dejar de lado las protestas o las contestaciones habituales.

La adaptación a la exigencia del equipo es innegociable. Para algunos jugadores será difícil, pero la alternativa es clara: o cambian y hacen lo que se les pide, o jugarán en el banquillo.

Que los jugadores nos exijan ganar es una anécdota que, en este contexto, tomo con humor. (jejejeje).

Me alegro por los chicos por la victoria. Pero el trabajo serio apenas comienza